River Plate tuvo una semana para el olvido. El martes quedó eliminado en instancia semifinal de Copa Libertadores tras caer por 4 a 2 ante Lanús en el sur de Buenos Aires. Ayer, en un partido vibrante con golazos, polémicas y expulsados cayó por 2 a 1 ante el eterno rival en el estadio Monumental. Una vez más, como suele pasar en partidos de esta índole, se destacó en River el que más sabe jugar estos encuentros, Leonardo Ponzio.
El capitán fue una vez más el alma de un River bastante desconexo. Al equipo de Marcelo Gallardo le costó la generación de juego y la llegada limpia al arco rival. Sin embargo, dominó el medio campo gracias al rendimiento de Ponzio, quien recuperó, metió cuando hubo que meter e incluso, a pesar de la derrota, se dio el lujo de marcar el gol del empate con un golazo rematando desde 30 metros, un recurso que supo utilizar de joven y que hace tiempo no ponía en práctica.
El capitán demostró una vez porque es el jugador más querido por el hincha en los últimos años. Su imagen de capitán, referente y líder se renueva en cada partido poniendo el pecho ante la adversidad. El contrato del bien apodado “león” de River finaliza a mediados del 2018. Todos piden por la renovación ¿Qué decisión tomarán el capitán y la dirigencia?
Vale destacar a otro que tuvo un gran partido, por lo menos en el aspecto defensivo. Enzo Pérez jugó su primer superclásico y realmente su actuación fue digna de un encuentro de este calibre. El ex Valencia fue de los más parejos en la marca e incluso cortó varios contraataques volviendo en velocidad y evitando goles en el arco de Lux.