Francescoli: ''La última media hora es difícil''

El Manager de River expresó sus sensaciones luego de la caída frente a San José de Oruro en Bolivia, en el marco de la primera fecha del grupo 6 de la Copa Libertadores. Además, habló al mercado de pases que recientemente acabó y elogió al presidente Rodolfo D'Onofrio por abrirle las puertas de la institución.

Francescoli: ''La última media hora es difícil''
Foto: La Página Millonaria
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Por Adrián Gallardo

El manager e ídolo de River, Enzo Francescoli, se refirió nuevamente a varios temas de la actualidad del equipo que en el día de ayer cayó en el debut en la Copa Libertadores frente a San José de Oruro en Bolivia.

En declaraciones al programa Estamos Motivados de Radio Belgrano, Francescoli hizo un análisis de la derrota en territorio boliviano y contó una anécdota de su pasado como futbolista: "He tenido la suerte o no tanto de jugar en la altura. No jugué nunca en Oruro, sí en La Paz, la última media hora es difícil, perdés distancia y sentido de la velocidad de la pelota. Ese constante esfuerzo sin la recuperación de oxígeno a la que está acostumbrando el cuerpo se pierde. Una vez quise parar la pelota con el pecho y me pegó en la cara. Ese problema tuvo Barovero en el gol, la ve en un lugar y salta casi al destiempo. Pero en el primer tiempo salió en un par de pelotas de manera casi perfecta".

Por otra parte, tuvo tiempo para hablar de lo que fue el mercado de pases Millonario durante el verano: “Gallardo no te pide veinte jugadores, te pide lo que le conviene y necesite. Un club como River debe comprar lo que es necesario y bueno. Para los refuerzos todos tratamos de buscar un fin común. Siempre hablamos”.

Para cerrar, el Príncipe relató un hecho que vivió luego de su retiro y agradeció a la actual dirigencia por abrirle las puertas del club: “Cuando dejé el fútbol busqué alejarme, incluso puse un canal de Tv en Estados Unidos. Estaba esperando el momento de sentirme cómodo. Éste era mi momento, ya había hablado con Rodolfo. El rol de Manager es bueno si te dejan libertad. Por suerte el presidente y los directivos me respetan”.