Campañon por donde se lo mire. Cuando allá en abril tras el empate en el Malvinas Argentinas frente Tigre, fue el fin del ciclo de Diego Flores de la dirección técnica de Godoy Cruz después de lanzar la popular frase: “ese hincha vip”, los dirigentes del club de calle Balcarce decidieron cortar la segunda etapa del ex ayudante de Marcelo Bielsa por la Bodega. Carlos Tévez o Luca Marcogiuseppe, eran los principales nombres en carpeta, pero asumía de manera interina Daniel Oldrá una vez al frente del barco en medio de la preocupación por sumar lo antes posible así el Bodeguero no mire de nuevo la zona roja del descenso.

No solamente no observa más la permanencia, sino que ahora tiene los ánimos por la nube y el mundo del Expreso recupero la memoria desde la llegada del Gato con hombres de la casa en su cuerpo técnico: Nicolás Olmedo, Marcelo Marcussi y Nelson Ibáñez se hicieron cargo esa mitad de la Liga Profesional. Con una buena performance en el torneo pasado, el Tomba terminó en el noveno escalón y en ubicación de clasificación directa a la Copa Sudamericana 2024.

Pero, en este segundo semestre tuvo un arranque arrasador a pesar que tuvo una sequía de seis empates en fila, Godoy Cruz nunca renunció a su estilo y en este nuevo periodo con Oldrá en el banco de suplentes, luego del triunfazo de anoche frente Newells en el Coloso Marcelo Bielsa comparte la punta junto a Belgrano y como plus extra es el tercer club con más puntos obtenidos en el año (59) sacando actualmente uno de los boletos a la fase de grupo de la Libertadores 2024.

Hace once cotejos que no conoce la derrota, el último tropezón en julio, cuando cayó en el penúltimo telón del torneo pasado ante Banfield (0-2) en el Florencio Sola. Ante todos estos condimentos y por ser uno de los principales responsables de este buen presente que está atravesando, el Tomba, Daniel Walter Oldrá fue elegido por la madre ente de la organización como el mejor DT de la décima jornada de la Copa de la Liga. Chapeau y de pie con esta campaña inolvidable para el Expreso que sueña cada día más en grande de colocarse la famosa primera estrella en el escudo y regresar a los ámbitos internacionales.