El arranque del primer tiempo fue parejo, poco juego y mucho traslado del balón. Boca Juniors se supo posicionar mejor en el campo de juego y ante la salida de los defensores de Estudiantes de La Plata, sus delanteros Andrés Chávez y Cristián Pavón cerraban el circuito de juego y obligaban al Pincha a realizar pelotazos largos sin destino alguno.

La primera situación de riesgo sería para el Xeneize. Tras la presión de Pablo Pérez, el ex Newell´s se hizo con la pelota y, luego de un gran desborde por el sector derecho, tiró un centro que fue conectado por la cabeza de Federico Carrizo. Pero, inmediatamente, la gran respuesta de Mariano Andújar evitó la caída del arco pincha.

Los dirigidos por el Vasco Arruabarrena eran más prolijos, mientras que el rival no podía pasar, de manera precisa, la mitad del terreno de juego. Las llegadas del club de la Ribera seguían siendo claras, pero el 1 del Pincharrata demostraba seguridad.

La primera aproximación seria del equipo de Nelson Vivas, terminó en gol de Gastón Fernández, luego de una jugada colectiva, que contó con gran participación de  Leonardo Jara. El polifuncional jugador xeneize le cedió el balón a la Gata, que se encontraba solo afuera del área, y con un gran definición, ponía en ventaja a los de La Plata. Después del tanto, el conjunto platense se hacía del balón y dominaba los hilos del juego hasta el final de la primera mitad.

El segundo tiempo arrancó de manera favorable para Estudiantes, primero un error de Lisandro Magallán, éste lo corrigió y ante la presión de los atacantes rivales, le cedió el balón a su compañero Nicolás Colazo, que sin tiempo de reacción y ante la gran presión por parte de los hombres pinchas, le quedó servido el gol a Elías Umeres. El juvenil sin titubear selló el 2 a 0 parcial para los de Nelson Vivas.

Aquel gol repentino dio una inyección de optimismo y la tranquilidad se hizo presente en los jugadores pincharratas. Por el lado de Boca, intentó hacerse de la pelota y con algunas aproximaciones desprolijas intentaban achicar el resultado. Quién probó con un gran remate fue Pérez, pero la reacción de Andújar fue mejor.

Lo que restaba del partido no fue más que un ida y vuelta, en el cual los hombres xeneizes intentaban de todas las maneras posibles contrarrestar a la defensa rival y encontrar el descuento lo más rápido posible. Sin tanta suerte, el partido finalizó 2-0 y Estudiantes terminó con puntaje ideal su participación en la Copa de Oro, quedándose con el trofeo. Por el lado de los de Arruabarrena, deberán corregir varias cuestiones defensivas de cara a la revancha ante River Plate el próximo sábado en Mendoza.