No tenía demasiada trascendencia el encuentro entre Quilmes y Godoy Cruz que cerraba la decimoctava fecha del Torneo Final. Si bien el Cervecero necesitaba como mínimo un punto más para confirmar su salvación desde las matemáticas, todo hacía indicar que los riesgos de descenso habían desaparecido tras la victoria del pasado fin de semana ante Arsenal.

El encuentro nunca salió del frío ritmo que imponía la noche. Si bien en el comienzo, los dirigidos por Martín Palermo se hicieron cargo de la posición que ocupan en la tabla e intentaron tomar la iniciativa, a excepción de un par de escapadas de Facundo Castillón que le trajeron alguna que otra complicación a la defensa de Quilmes, Godoy Cruz no pudo generar demasiado peligro sobre el arco de Emanuel Tripodi.

Quilmes, por su parte, si bien demostraba conformismo con el empate, apostaba a una escapada de Martín Cauteruccio, o alguna genialidad de Miguel Caneo, que le permitiese abrir el marcador y dormir en la tranquilidad de la victoria. Pero el Cervecero no estuvo preciso de mitad de cancha hacia adelante y se notó. Ni Sebastián Romero, ni Jacobo Mansilla pudieron ser compañía de un impreciso Caneo, y desde allí, Quilmes se estancó en la ofensiva.

Durante el segundo tiempo se repitió el trámite de lo sucedido en la etapa inicial. Godoy Cruz se paró como dominador, tuvo la pelota y contó con alguna que otra chance aislada, contra un Quilmes que se paró bien atrás, y terminó de mirar con cariño al empate. La diferencia fue que cuando el partido ingresaba en su cuarto final, Cauteruccio contó con un par de escapadas que terminaron en sendos remates que salieron desviados aunque llevaron algún que otro riesgo sobre el arco de Moyano.

Una vez que Pablo Díaz pitó el final del encuentro, en Quilmes se desató la euforia por haber logrado el objetivo. Es que con el punto obtenido tras la igualdad de hoy, el Cervecero logró su cometido de asegurarse la permanencia en Primera División en la temporada que viene, a una fecha del final del año futbolístico actual. Sus jugadores se juntaron en el centro del campo de juego y comenzaron a cantar junto a la hinchada que vibraba gritando que “Quilmes es de Primera y de Primera no se va”. Godoy Cruz, por su parte, quedó a 2 puntos de los 30 que se pactó en el inicio del torneo, y deberá vencer a Boca, el próximo domingo, para conseguir su objetivo particular.