Al igual que el ave fénix renace de sus cenizas, San Lorenzo resurgió desde lo más profundo de las tinieblas. A punto de jugar la B Nacional, con un club mal económicamente, endeudado con sus empleados; así se encontraba San Lorenzo a mediados de 2012, en la más pronunciada crisis que un club de fútbol puede padecer y gracias a la perseverancia y al no bajar los brazos, la nueva dirigencia encabezada por Matías Lammens y Marcelo Tinelli cambiaron la cara del club. Primero intentaron acomodar el tema económico y luego empezaron con lo futbolístico, haciendo compras de jugadores para capitalizar al plantel. Así, una vez que la casa estuvo en orden los resultados positivos vinieron solos y esto queda plasmado en como se cerró el 2013, San Lorenzo fue campeón una vez más.

Primer semestre

El 2012 para San Lorenzo no había sido el mejor ya que peleó por no descender, tuvo que disputar la promoción frente a Instituto de Córdoba y luego de una crisis en lo dirigencial se quedó sin presidente. Inmediatamente Matías Lammens y Marcelo tinelli se pusieron al mando de San Lorenzo, como presidente y vicepresidente respectivamente.

A partir de ese momento, el ciclón dio vuelta la página y cambió para mejor. Con la contratación de Juan Antonio Pizzi como director técnico del club, en la fecha 11, los cuervos, de a poquito, comenzaron a volar. El DT llegó para cambiar la impronta de trabajo y lograr algo que, hasta el momento, no estaba claro: una identidad futbolística. San Lorenzo encontró una estabilidad en su juego, sus jugadores comenzaron a recuperar la confianza perdida y gracias a esto, el ciclón empezó a sacar buenos resultados que hicieron que pudiera escalar en la tabla de los promedios. A pesar del buen rendimiento que tuvo en la última parte del torneo, el equipo finalizó décimo primero con 26 puntos.

Pensando en que termino el año 2012 jugando mejor, San Lorenzo arrancó el 2013 con grandes aspiraciones. El ciclón, pese a seguir peleando por no descender, quería devolverle algo de lo que la hinchada le dio en los últimos meses y tratar de pelear el Torneo Final. Para eso fue a buscar un refuerzo con experiencia, como lo fue Mauro Cetto proveniente del Calcio, que vino a reemplazar al capitán del equipo, Nicolás Bianchi Arce, que emigró al Pescara de Italia.

Otros que dejaron la institución de Boedo fueron: Julio Furch y Martin Rolle que pasaron a Arsenal de Sarandí, Augusto Álvarez paso a Douglas Haig y el juvenil Sebastián Luna que quedó con el pase en su poder. Con estos cambios en el plantel, el ciclón arrancaba un nuevo año, un año en que debía ratificar todo lo bueno que hizo en el último tramo del torneo anterior.

Torneo Final 2013

San Lorenzo arrancaba este campeonato, fiel a su estilo y acorde a toda su historia, buscando ser protagonista del torneo, como siempre. Con Juan Antonio Pizzi cada vez más afianzado en el banco del cuervo y con un equipo que formaba casi de memoria, el ciclon debutaba contra San Martín, en San Juan, en un duro partido que se jugaba entre dos equipos que querían sumar para lograr la permanencia en Primera División. Pero no fue ni el partido ni el debut esperado, fue un pobre empate sin goles que dejaba preocupado al técnico y a sus propios hinchas. La preocupación se hizo más grande, ya que en las siguientes dos fechas volvió a empatar, frente a Belgrano (0-0) y Estudiantes (1-1).

El poco gol que tenía el conjunto azulgrana lo tenía a Juan Antonio Pizzi un poco intranquilo, por eso para la cuarta fecha, frente a River metía mano en el equipo. El dueño del banco azulgrana sabía que el clásico frente a los millonarios era una prueba de fuego para San Lorenzo, iba a determinar para que estaba el equipo, por eso mandaba a la cancha un equipo más ofensivo con Franco Jara, Álan Ruiz y Denis Stracqualursi en la delantera. El partido salió como lo había planificado el ex técnico de Rosario Central, San Lorenzo jugó uno de los mejores partidos del campeonato y terminó ganándole a River por dos a cero, con goles de Stracqualursi y Mauro Cetto. San Lorenzo sumaba su primer triunfo en el campeonato, seguía sin perder y se alejaba de los que peleaban por no descender.

En la quinta fecha sufrió la primera derrota del torneo, fue frente a Tigre jugando en el Nuevo Gasómetro. El único gol del partido lo marcó Rubén Botta de penal, después de que Mauro Cetto toque la pelota con la mano dentro del área y el árbitro Diego Ceballos cobre la falta, una jugada que trajo mucha polémica luego que terminara el encuentro.

Días después de que el ciclón pierda su invicto, sufrió una baja importante. Ya que Luis Aguiar, una pieza clave de este equipo, se peleó con el cuerpo técnico y tuvo que abandonar el club. Esto sucedió en la misma semana que se designó al nuevo Papa, nada más ni nada menos que un argentino e hincha de San Lorenzo. El antes cardenal Bergoglio y ahora Papa Francisco hizo que la institución de Boedo este en los diarios de todo el mundo. En una semana en la que pasó de todo, San Lorenzo la cerró ganándole a Colón de Santa Fe con un gol en contra de Rubén Ramírez.

Después del encuentro frente al Sabalero, los cuervos tuvieron una mala racha de tres partidos sin triunfos, en los cuales perdió de local frente a Newell’s (0-1), por goleada frente a Racing (1-4) y apenas pudo rescatar un empate, de visitante, contra Vélez (1-1). Luego de la derrota frente a los rosarinos, Pablo Migliore fue detenido en el vestuario del Nuevo Gasómetro, por una supuesta vinculación con barrabravas de Boca. El Ciclón volvía a perder una pieza clave, esta vez fue el arquero y capitán del equipo. En su lugar trajo a Sebastián Torrico, ex arquero de Argentinos Juniors y Godoy Cruz.

Los malos resultados hacen que la institución de Boedo deje de soñar con salir campeón y vuelva a hacer cuentas por el promedio. Independiente se puso a cinco puntos de este equipo. Debido a esto, se dudó de la continuidad de Pizzi y hasta se habló de Julio Falcioni como posible sucesor. Con este panorama tuvo que enfrentar a Arsenal. Fue en ese momento donde el ex delantero del Barcelona empezó a apostar por los juveniles. Los cambios y las apuestas en el equipo dieron su fruto, ya que venció 3 a 1 al conjunto de Sarandí con goles de Navarro, Villalba y Julio Buffarini.

A partir de ese partido, San Lorenzo no volvió a conocer la derrota en todo el torneo. Le ganó a Quilmes (2-1), Boca (3-0), All Boys (3-0), Unión (4-2) e Independiente (1-0); pero fueron los empates frente a Godoy Cruz (1-1), Atlético Rafaela (0-0), Argentinos Juniors (1-1) y Lanús que no le permitieron a San Lorenzo levantar el trofeo del Torneo Final. De todas formas, los cuervos hicieron una gran campaña, terminaron cuartos con 32 unidades a solo seis de Newell’s, el campeón.

Gracias a la buena campaña que hizo San Lorenzo en el campeonato y que seguía avanzando en la Copa Argentina (le ganó a Morón por penales y a Atlético Rafaela 3 a 0 con un hat-trick de Ignacio Piatti), le renovaron el contrato a Juan Antonio Pizzi, por dos años más.

Segundo semestre

Terminado el primer semestre con una buena campaña en el Torneo Final y la permanencia en la Copa Argentina, la dirigencia de San Lorenzo, encabezada por Matías Lammens y Marcelo Tinelli comenzaron las negociaciones para incorporar jugadores de cara a la segunda mitad del año. Cristian Álvarez (Espanyol de Barcelona), Emmanuel Mas (San Martín de San Juan), Martín Cauteruccio (Quilmes), Fabricio Fontanini (Atlético Rafaela), Fernando Elizari (Quilmes), Santiago Magallán (Gimnasia de La Plata), Valentín Perales (Cipoletti) y Juan Cavallaro (Unión) fueron los ocho refuerzos que se cerraron para disputar las tres competencias, Torneo Inicial, Copa Argentina y Copa Sudamericana, que tenían por delante.

Se armó un plantel para que San Lorenzo de la mano de Juan Antonio Pizzi termine el 2013 en lo más alto de los torneos en los que iba a participar y por eso agosto era el mes clave para saber cual sería el destino del equipo.

En el torneo Inicial comenzó con el pie derecho, de local por la primera fecha derrotó por 2 a 1 al reciente ascendido Olimpo con un doblete de Cauteruccio; y se prendía en la punta junto a Newell´s ya que en la fecha dos goleaba en Avellaneda a Racing por 3 a 0.

No sólo en el campeonato obtenía victorias sino que por los Cuartos de Final de la Copa Argentina derrotaba por 2 a 0 a Gimnasia y Esgrima de Concepción del Uruguay en Resistencia (Chaco) y así se aseguraba el paso a la Semifinal.

Luego de estas tres victorias, el panorama se vio modificado para el equipo de Boedo. Por primera y única vez en el torneo, tuvo dos derrotas consecutivas. Primero recibía la goleada de Argentinos Juniors (3-0) y luego era derrotado por Quilmes 3 a 2.

La derrota de local frente al equipo de Caruso Lombardi fue un golpe duro para el plantel y esto se vio reflejado en la Copa Sudamericana ya que San Lorenzo quedó eliminado en primera ronda tras perder con River. En el partido de ida, disputado en el Nuevo Gasómetro, fue victoria del visitante por la mínima diferencia que fue suficiente para que se termine la Copa para el ciclón ya que el Monumental no se sacaron ventajas.

Con la eliminación de la Copa Sudamericana y las derrotas acarreadas en el Torneo Inicial parecía que a San Lorenzo sólo le quedaba concentrarse en la Copa Argentina, que lo tenía como semifinalista, pero un nuevo cambio de rumbo generó que consiguiera un invicto de 6 partidos sin perder en el campeonato local. Fueron 4 triunfos frente a River (1-0), Rosario Central (2- 0), Colón (2-0) y Gimnasia (3-0) y 2 empates, Godoy Cruz y Tigre, ambos sin goles.

Encaminado en el Torneo Inicial 2013, dejada atrás la eliminación temprana de la Copa Sudamericana llegó el momento de jugar la semifinal de la Copa Argentina nuevamente en el estadio Centenario de Resistencia frente a Estudiantes (BA). El encuentro terminó empatado en un gol y se definió por penales donde los dirigidos por Pizzi se impusieron por 5 a 4 y así logaron la clasificación para la final.

El 16 de octubre Catamarca se inundó de hinchas azulgranas que recorrieron alrededor de 1200 kilómetros para alentar al equipo en la final con la ilusión de conseguir el título que los clasificaría a la tan ansiada Libertadores.

El rival era Arsenal, con quien venía de perder por el campeonato local 2 a 1, y el resultado se volvió a repetir en el Centenario. El equipo demostró que no estaba a la altura de jugar una final, decepcionó con su accionar y perdió la final de la Copa Argentina por 3 a 0.

Esta derrota fue golpe muy duro para todos, no sólo se perdió un título y la clasificación a la Copa Libertadores sino que dejó una nueva baja en el plantel. Al ya lesionado Martín Cauteruccio, rotura de ligamentos cruzados, se le sumó la misma lesión en Gonzalo Verón; y con la pérdida de estos dos delanteros, San Lorenzo debía afrontar el final del Torneo Inicial sin ningún centrodelantero.

Con la cabeza puesta nada más en el torneo local, el equipo revirtió rápidamente la imagen dejada en Catamarca y goleó 3 a 0 de local a All Boys; este resultado traía tranquilidad e ilusionaba con el título pero la ilusión duró poco ya que en la fecha siguiente perdió por 3 a 2 contra Lanús, en un partido que había dado vuelta y ganaba por 2 a 1.

La caída ante el equipo granate fue la última de San Lorenzo en este torneo, a tan sólo seis fechas del final y con los resultados obtenidos se convertía en un serio candidato a quedarse con el título. Ganó los dos partidos de local, frente a Boca (1-0) en la fecha 14 y en la fecha 16 triunfó por 4 a 2 ante Belgrano; y empató los dos encuentros que tuvo de visitante, en primer lugar 1 a 1 contra Newell´s y en la fecha 17, de la mano de Ignacio Piatti igualó 2 a 2 con Rafaela, este resultado le permitía llegar con posibilidades de coronarse campeón en la anteúltima fecha si le ganaba a Estudiantes y se daban otros resultados.

Fecha 18 del Torneo Inicial, San Lorenzo jugaba el domingo con todos los resultados a su favor, sólo tenía que ganar y esperar que Lanús no resulte vencedor en su partido frente a Boca. Nuevamente, la gente acompañó al equipo con ganas de gritar campeón pero una vez más, al igual en la final de la Copa Argentina, los jugadores no disputaron el encuentro como una final y sólo obtuvieron un empate en cero que postergaba la definición del torneo para la última fecha.

Llegó el último partido, San Lorenzo visitaba a Vélez y al mismo tiempo Newell´s se enfrentaba a Lanús, ya que estos eran los cuatro equipos con chances de salir campeón. A lo largo de los 90 minutos, en Liniers no hubo grito de gol pero como en Rosario el partido terminó en un empate en dos goles, una vez finalizado, San Lorenzo gritó campeón. Con tan sólo 33 puntos, es el campeón con menor cantidad de puntos pero no importa ya que suma su duodécimo título y consiguió la clasificación a la Copa Libertadores 2014.

Cuando parecía que el 2013 terminaba a puros festejos y pensando en las cuatro incorporaciones (tiene dos refuerzos adicionales, uno por jugar la Libertadores y otro por el lesionado Gonzalo Verón), el técnico Juan Antonio Pizzi renunció a su cargo como entrenador para irse a dirigir el Valencia. Esto cambio los planes de la dirigencia cuerva, reelecta con el 83% de los votos, que tuvo que salir a buscar un DT cuando nadie lo tenía en los planes y contrataron a Edgardo Bauza que empezará su trabajo el 3 de enero de 2014.

Con la obtención del Torneo Inicial 2013, San Lorenzo termina un año que tuvo algunas decepciones de la mejor manera posible, con un título más en la vitrina y con el pensamiento puesto en la tan ansiada Copa Libertadores.

Para terminar con los festejos por el Torneo Inicial 2013, Lammens, Tinelli, Romeo, Cetto y Torrico visitaron al Papa Francisico para llevarle el trofeo.

Once ideal del 2013:

12- Sebastián Torrico: Llego en la mitad del primer semestre por lo sucedido con Pablo Migliore y se ganó el puesto con sus grandes actuaciones, a pesar de la llegada del Cristian Álvarez. Sus atajadas contra el Chiqui Pérez y contra Allione en el final del partido frente Vélez, lo transformaron en una de las figuras.

7- Julio Buffarini: Su puesto natural es de volante por derecha, pero Juan Antonio Pizzi aposto por él y lo puso como lateral por derecha, relegando a Matias Catalán y a Gonzalo Prósperi. Al principio le costó, pero cuando se adapto al puesto se transformo en una pieza clave para el equipo.

25- Pablo Alvarado: Capitán y referente del club. Le dio tranquilidad al equipo desde la defensa, salía siempre jugando gracias a su buen pie y hasta se animo a pasar al ataque, como lo hizo en el partido contra Gimnacia marcando un golazo. Es el único sobreviviente del título conseguido en el 2007.

6- Santiago Gentiletti: A pesar de haber sido criticado en su llegada al club, Genti le hizo oídos sordos a esos murmullos dándole la razón a quienes confiaron en él. Se transformó en una pieza clave para Pizzi.
14- Walter Kannemann: Zaguero que se ganó la banda izquierda. No le sobra talento; sí en cambio mucho caráter y actitud. Walter con sus actuaciones le ganó el puesto a Emmanuel Más, que venía de San Martín de San Juan. Deja la vida en cada jugada y es amado por el hincha de San Lorenzo.
5- Juan Mercier: Pieza clave de este San Lorenzo campeón. El único que salió ileso en los vaivenes del equipo a lo largo del torneo, y el que más brillo cuando el Ciclón explotó. El pichi lideró el mediocampo y se transformó en uno de los mejores jugadores del fútbol argentino.
8- Enzo Kalinski: Fanático de San Lorenzo. Se Bancó un inicio de certamen con actividad casi nula, la remó y terminó copando el mediocampo codo a codo con Mercier.
28- Ignacio Piatti: Más allá de un primer semestre lleno de lesiones, sin duda él fue el jugador que más influencia tuvo en la consagración de San Lorenzo. Abrió partidos chivísimos, de esos que, por el envión, valen más de tres puntos: sobre todo su noche mágica en Rafaela, marcando dos goles que le sirvieron al Ciclón empatar un partido que estaba perdido. Con ocho goles fue el goleador del equipo campeón.
11- Ángel Correa: La joyita de las inferiores del club. En el mercado de pases, se lo intentaron llevar de Europa pero él se quedó para salir campeón con sus amigos. Aprovecho su velocidad y calidad para darle ritmo y juego al equipo. Un crack.
10- Leandro Atilio Romagnoli: El mayor ídolo y ganador de la historia de San Lorenzo. Un referente fuera y dentro de las canchas. Con 32 años sigue
demostrando que la magia nunca se fue, que la magia sigue intacta.
15- Héctor Villalba: Estuvo a punto de partir a Ucrania, pero se quedó para salir campeón. Por las lesiones de Verón y Cauteruccio terminó siendo el punta titular de San Lorenzo.