Se disputó la décima fecha del Torneo de Primera División, en la cual se enfrentaron River Plate y Sarmiento de Junín. Un duelo de necesitados. Por el lado del local, se encontraba sumamente necesitado de revertir la imagen que habían dejado al terminar derrotados frente a Patronato. El conjunto de Junín, con la latente necesidad de seguir sumando para escapar de la zona de descenso, luego de obtener un empate frente a Independiente.

Todo comenzó cuesta arriba cuando, en el inicio del partido, apareció el primer gol del partido. A los 4 minutos del primer tiempo, Iván Alonso luego de una floja respuesta de la defensa, consiguió abrir el marcador. Sarmiento sumergido en la urgencia de seguir sumando, iniciaba el encuentro 0-1 desde el arranque.

Pero las cosas iban a ponerse aun más complicadas. Veinte minutos despúes del primer gol, River a través de Milton Casco, volvía a convertir y así estirar la ventaja sobre su rival en 24 minutos del primer tiempo. El marcador reflejaba un 0-2 en contra para los dirigidos por Ricardo Caruso Lombardi.

Pero a los 26 minutos del primer tiempo, Alexis Niz pudo darle un respiro a Sarmiento y de esta manera conseguir el gol de descuento, el partido se encontraba ahora 1-2. El primer tiempo concluía pero por lesión debió abandonar el campo de juego Emanuel Mammana y en su lugar ingresó Joaquín Arzura quien posteriormente ocasionaría una situación determinante.

Durante el segundo tiempo las situaciones más peligrosas fueron ocasionadas por Sarmiento, el equipo local sólo pudo llegar con poco peligro al arco defendido por Emanuel Trípodi. El momento de mayor dramatismo llegó cuando el partido estaba a punto de finalizar, un remate de Kevin Mercado impactó en la mano de Joaquín Arzura dentro del área. Por este motivo Jorge Baliño no dudó en cobrar penal en favor del conjunto de Junín.

Cerca de los 47 minutos del segunto tiempo, Diego Cháves se hizo cargo del penal y en su ejecución consiguió establecer el empate. De esta manera el marcador determinaba un 2-2. Luego de la conversión el partido se dio por finalizado, otorgando más que un punto a Sarmiento, sino un empate con sabor a victoria. Un partido en el que los dirigidos por Caruso jamás se dieron por vencidos y lo fueron a buscar en todo momento incluso estando debajo del marcador.

Por su insistencia, por su coraje, por su gran deseo y objetivo de permanecer en Primera División, Sarmiento regresa a Junín con un punto que vale oro.