Volvió Racing. Volvió a mostrar esa cara pobre. Volvió a regalar un tiempo, pelota, campo. Volvió a cometer errores en defensa y en ataque. El mediocampo, fue una autopista para que Gago y Tevez se hagan un festín. Y así fué. Es como si el equipo aguerrido que ganó el clásico de punta a punta se quedó en el Cilindro. El partido que Racing jugó con Boca o, al menos, el primer tiempo, fue merecedor de otra conferencia de prensa de Licha, para que se despierten, porque pareciera ser que lo de CAI fue solo para calmar las aguas.

El primer tiempo de Racing fue desastroso. No jugó a nada, no tuvo reacción, no marcaba ni atacaba. Estaba perdido. Ya a los 30 segundos Orión tuvo que sacar un remate de Tevez que se metía. Ese fue un aviso de lo que iba a ser el primer tiempo. El Apache estuvo completamente sólo todo el tiempo. Jugó libre, y en asociación con Gago fueron una dupla letal para Racing. Sanchez y Vittor pareciera que no estuvieron en el partido. Pillúd perdió siempre e Insúa intento sacar el primer gol del Xeneize y lo terminó afirmando más y, para colmo, se lesionó. El triple 5 que puso Zielinski lo único que hizo fue entorpecer el traslado del balón de Racing. Ni marca ni juego. Romero, oculto. Licha y Bou, desentendidos entre ellos y con el resto. Un equipo tibio, que no supo que hacer ante el toque y toque de Boca, que fue una aplanadora.

El segundo tiempo, con el ingreso de Guisao por Gonzalez, arrancó igual. Y a los dos minutos, hubo gol de Boca. Pero esta vez Racing por lo menos tuvo reacción. Primero, un gran pase de Romero que conectó Licha Lopez marcó el descuento para la Academia. Y después, nuevamente tuvo que aparecer el delantero ante el rebote que dejó Sara para poner el 2-3 parcial. Por unos instantes, Racing ilusionó con concretar el empate, pero fue poco más que eso. Hasta que llegó el gol de Tevez que liquidó el partido.

¿Las conclusiones que deja el partido? Son que hay que trabajar mucho la defensa (zona a reforzar de cara al proximo mercado de pases), que hay mediocampistas que no están en buen nivel y hay que evaluar su titularidad (caso Aued), que Romero debería dejar de ser Romerito y distribuir el juego de Racing hacia adelante, más precisamente a los delanteros, que quedaron faltos de juego. Racing debería empaparse mas de Licha Lopez y jugar cada partido a fondo. Dejando todo. Amando a la camiseta.

El próximo fin de semana, Racing recibirá a Olimpo de Bahía Blanca y esta obligado a, cuanto menos, jugar bien, sin importar el presente del rival.