Este martes, desde las 19.15 hs, Estudiantes de La Plata recibirá en el Estadio Ciudad de La Plata a Nacional de Paraguay, por el partido de vuelta de los octavos de final de la Copa Sudamericana. Encontrándose en desventaja por un gol, el conjunto dirigido por Gustavo Matosas deberá anotar al menos un gol para igualar la serie e ir a penales.

Tras lo que fue empate ante Colón en Santa Fe el pasado viernes, Estudiantes busca dar vuelta la página y volver a la victoria en competencia internacional. Pese a que el Pincha se encuentra flojo y muy discutido por lo hecho dentro del campo de juego, esperará ganar el encuentro para seguir con vida en el certamen, ya que quedar eliminados oscurecerá un poco más el panorama. Debido a la caida en el partido de ida por 1-0, Estudiantes debera convertir un gol para igualar la serie, dos para pasar de fase, y rogar que la visita no marque, ya que sino deberá anotar tres goles.

Con este contexto, Matosas evaluó un once titular sin la presencia de Leandro Desabato, señalando que en circunstancias de partido podra quedar mal parado atras, y no es un partido para el capitán. Por otro lado, tampoco estarán entre los 11 Lucas Diarte ni Gastón Fernandez. Gastón Campi será el central zurdo, Sebastian Dubarbier el lateral izquierdo, y Otero junto a Aleman, serán las bandas del mediocampo.

El once titular: Mariano Andujar, Facundo Sánchez, Jonathan Schunke, Gastón Campi, Sebastian Dubarbier, Juan Ferney Otero, Israel Damonte, Rodrigo Braña, Christian Alemán, Lucas Melano y Mariano Pavone.

La terna que dirigira el encuentro será de nacionalidad Brasilera y estará encabezada por el juez Raphael Claus, acompañado por Bruno Boschilia (Asistente 1), Kleber Lucio Gil (Asistente 2), Wagner Reway(Cuatro Árbitro). 

Por último, el conjunto paraguayo pondrá sus mejores fichas para conseguir la clasificación, y contará con el ex albirrojo Juan Manuel Salgueiro. El pasado fin de semana, por la liga de su país, fue derrotado por 5-0. Como señalaron sus jugadores, vendran a La Plata para meterse atrás y apostar al contragolpe.