Muchos jugadores debieron irse del club ya que se les venció el contrato y la dirigencia junto al cuerpo técnico decidieron no renovarles. Otro caso son las ventas, las cuales le dejaron un gran dinero al club, que perdió en lo futbolistico . En total hubo cinco ventas, seis fin de contrato, tres rescisiones. Caso por caso:

Nahuel Losada: El arquero juvenil renovó contrato con All Boys, club que compró el 70 % del pase y por lo tanto prolongó su vínculo por cuatro años. Losada realizó un excelente primer semestre de año siendo uno de los jugadores más importante del plantel que logró la permanencia.

Matías Aguirregaray: El uruguayo con buen paso por el conjunto Pincharrata, vistió la camiseta en 84 ocasiones, pero decidió no renovar su contrato con la institución platense y emigró hacia la liga mexicana, precisamente al  Club Tijuana Xoloitzcuintles de Caliente,  dirigido por el argentino Eduardo Coudet.

Juan Foyth: El zaguero de 19 años, partió a lo que será su primer paso por el fútbol europeo, ya que, a cambio de 13.5 millones de euros firmó contrato hasta 2022 con el Tottenham de la Primera División de la liga inglesa, dirigido por el santafesino Mauricio Pochettino.

Jeisson Vargas: El extremo juvenil de 19 años llegó a préstamo en la temporada pasada, pero solo tuvo la oportunidad de jugar nueve encuentros. Finalizó su vinculo y retornó a Universidad Católica de Chile, pese a que Bologna de Italia (dueño del pase) pensaba sumarlo a sus filas este semestre. Debido a su bajo rendimiento, volverá al futbol de su país.

Luciano Vargas: El defensor de 23 años surgido de las divisiones inferiores de Estudiantes, en los últimos años no pudo asentarse en la Primera División a pesar de firmar contrato. Al no ser tenido en cuenta, el club le rescindió su contrato y  jugará en Club Rivadavia de Lincoln, del Argentino A.

Santiago Ascacibar: El mediocampista de 20 años fue vendido al Stuttgart, equipo  recién ascendido a la Bundesliga. Firmó contrato allí por  próximas cinco temporadas. El club alemán pagó 8.500.000 dólares por su pase.

Lucas Viatri: A principios del mercado de pases, la dirigencia Pincharrata decidió no hacer uso de la opción de compra 1,2 millones de dólares por la mitad de su ficha, tras 18 meses de vínculo, debido al alto valor de su pase y las lesiones que le restaron continuidad al jugador. Tras tener una tentativa por el club chileno Colo-Colo, el delantero de 30 años seguirá su carrera en Peñarol de Uruguay.

Javier Toledo: El delantero que no tuvo un paso muy exitoso por Estudiantes, disputó 19 encuentros en total. Pese a que su contrato tenía opción de renovar el préstamo por un año más, dejó Estudiantes para sumarse al conjunto paraguayo Sol de América, dirigido por Fernando Ortiz.

Javier Iritier: El volante que había llegado a Estudiantes en condición libre, tuvo poco rodaje, no siendo de la partida titular, y por este motivo rescindió contrato (por pedido del jugador) y firmó por un año con Tigre.

Juan Ignacio Cavallaro: El volante, luego de estar a préstamo en Estudiantes, retornó a San Lorenzo, desatando un conflicto, puesto a que llegó al conjunto de Boedo con una grave lesión en la rodilla derecha por la que debió ser intervenido quirúrgicamente y de la cual la dirigencia platense no dio aviso alguno. El Pincha no hizo uso de la opción de compra.

Augusto Solari: El mediocampista derecho había llegado cedido por 12 meses sin cargo y con opción de compra, pero la dirigencia desistió de hacer uso de esta opción de compra.  El jugador retornó al Millonario y  fue vendido a Racing, a cambio de 2.300.000 dólares y  firmó su contrato por cuatro años.

David Barbona: El mediocampista fue vendido a Atlético Tucumán, la dirigencia del decano pagó el pase del jugador por un valor de 700 mil dólares.

Leonardo Gil: El jugador debió volver de su préstamo en Talleres, pero decidió no continuar en el club platense y fue vendido a Rosario Central en una suma de 750.000 dólares por el 50% perteneciente a Estudiantes.

Lucas Calderón: El delantero categoría 1998 se quedó con su pase para poder emigrar a otro club y decidió irse a probar a Ferro. El juvenil disputó mas partidos en la Cuarta División que en Reserva y, con el plantel profesional, apenas tuvo un puñado de entrenamientos.